Muchas veces he pensado que esta vida nos deja libertad de actuar y desarrollar todo lo que somos, y de la misma manera que nos ofrece la felicidad, en un segundo nos puede arruinar todo lo que somos y tenemos.
Hace unos días, no recuerdo cuántos, todo pudo cambiar para un grupo de amigas que paseábamos frente al Cantábrico, en un instante “la Parca” nos miró de soslayo y pensó que aún no era nuestro tiempo, pero nos dejó un amargo recuerdo de un viaje que se prometía feliz.
Hoy casi recuperada y viendo en la distancia lo ocurrido quiero acordarme de mis compañeras de caída y sobre todo del exquisito trato que nuestras compañeras y compañeros de Astilleros nos dispensaron. Hemos encontrado a compañeros y compañeras maravillosas que han sustituido estupendamente a nuestras familias, en esos momentos donde estábamos más desvalidas, turnándose, haciendo grupos, dándonos en una palabra cariño.
Hace unos días, no recuerdo cuántos, todo pudo cambiar para un grupo de amigas que paseábamos frente al Cantábrico, en un instante “la Parca” nos miró de soslayo y pensó que aún no era nuestro tiempo, pero nos dejó un amargo recuerdo de un viaje que se prometía feliz.
Hoy casi recuperada y viendo en la distancia lo ocurrido quiero acordarme de mis compañeras de caída y sobre todo del exquisito trato que nuestras compañeras y compañeros de Astilleros nos dispensaron. Hemos encontrado a compañeros y compañeras maravillosas que han sustituido estupendamente a nuestras familias, en esos momentos donde estábamos más desvalidas, turnándose, haciendo grupos, dándonos en una palabra cariño.
Mención aparte merece el trato que he recibido de unos magníficos profesionales de la sanidad de Cantabria, por desgracia, no puedo decir lo mismo del sistema sanitario que nos racaneó una atención especializada en un hospital que parecía un hotel pero que pasó de darnos todos los cuidados que merecía la gravedad de nuestra situación.
La anécdota, si es que el suceso en sí no lo es, fue el ataque de ciertos descerebrados, en los medios de comunicación, dejando comentarios insultantes por el mero hecho de que éramos socialistas. En fin pelillos a la mar, porque soy de la opinión de que el ayer es historia, el mañana es misterio y el hoy es un regalo, por eso se llama Presente. He querido arañar un poco esa historia del ayer para que quede constancia en este mi blog la existencia de amigas y amigos maravillosos, a los cuales llevaré en el corazón para siempre.
Me cuesta,aún ver la foto que has puesto.Aún se me "erizan" los vellos, pero cada dia hay que vivirlo con mayor intensidad.
ResponderEliminarAnte los recuerdos trites,me invaden las miradas,apoyos,cariños y HECHOS de un grupo de compañeras y compañeros de la agrupación del PSOE de Astillero,que permanecieron PERENNES,con las cinco compañeras de Chiclana,que invadidas por el dolor(algunas fisicos y otras psiquicos)supieron demostrar lo que significa AMISTAD y por encima de todo HUMANIDAD.Nuestros dolores fueron decreciendo,gracias a la compañia que nos ofrecian.Gracias,gracias y mil veces GRACIAS.Nunca olvidaremos estas cinco chiclaneras vuestro comportamiento.Cuelga decir que me sumo a todo lo ha dicho mi amiga y compañera MªCarmen.
La mejor definición para este grupo de compañeras y compañeros es el de: "Güena gente".
Un fuerte abrazo.Besos.
Salud y República.