Hace unos días mientras revisaba mis correos, de repente me dio por mirar a mis hijos, y mientras los miraba, mi mente hizo un recorrido fugaz por mi vida.
Me vi igual que ellos, bueno igual no, yo nunca tuve lo que ellos tienen y ellos desgraciadamente nunca tendrán lo que yo tengo.
¿Un lío verdad?, pero un lío en el que nos van las condiciones de vida de nuestros hijos y nietos.
Yo no nací en las postrimerías del franquismo, y mis recuerdos más sólidos son de época democrática, pero mis antecesores, procuraron que sus sucesores conocieran claramente, qué fue y qué supuso el franquismo para los españoles y españolas.
Tengo la seguridad de que la crisis, ha abierto una puerta, difícil de cerrar, por donde los cachorros de los que vivían bien con el franquismo, han entrado para quedarse con todo lo que hombres y mujeres como mis abuelos, padres…, lucharon para conseguir una sociedad mejor y más justa.
Rajoy como cabeza de un neoliberalismo feroz en estos dos últimos años ha desmontando pieza a pieza todo el estado de bienestar:
Ha machacado la escuela pública, en beneficio del opus y los sectores más reaccionarios de la iglesia, ha cambiado la ley de educación, ha impedido el acceso de los hijos de los trabajadores a las escuelas y universidades públicas reduciendo las becas y aumentando los requisitos para conseguirlas. Y lo que más me indigna es que el ministro Wert mienta y se ríe continuamente de los ciudadanos y ciudadanas.
La sanidad pública está siendo vendida al mejor postor, eso sí , se vende sólo lo rentable, lo oneroso se queda.
La ayuda a la dependencia podemos decir que está en vías de extinción, cada día vemos casos más sangrantes de personas apartadas de las ayudas.
Los 5 Millones de parados y los recortes salariales, y sobre todo los cerca de 2 Millones de hogares sin ningún miembro trabajando, tienen sobres sus cabezas la pérdida de sus casas en manos de una banca sin escrúpulos, que no sólo te quita tu casa, además, la tienes que pagar aunque ya no sea tuya, mientras ellos reciben 60.000 millones de € para tapar los boquetes de sus sueños inmobiliarios. !Ah!, se me olvidaba, tu casa la venderá y por este milagro cobrará tres veces su valor.
Por si fuera poco, la normativa laboral se ha destruido primero vía BOE y ahora se está atacando sutilmente a los sindicatos, con el fin de dejar al trabajador o trabajadora desnudos ante los empresarios que cada vez están haciéndose más ricos.
Por si nos da por indignarnos, se cambian las leyes y ponemos multas de 600.000 € a pensionistas, parados mileuristas y a jóvenes sin futuro, mientras la SICAV cotizan al 1% y hacen amnistías fiscales para los amiguetes que tienen sus ahorros en paraísos fiscales.
He leído en alguna parte, que los que ya están al fin de su vida laboral, de media han estado en cuatro puestos de trabajo diferentes, mientras que nuestros hijos se espera que tengan no menos de 30.
Están fabricando un mundo laboral para contratos temporales carentes de indemnización y con una gran rotación y sobre todo con un salario de miseria.
Por si las moscas, la justicia, la sanidad y la enseñanza dejan de ser gratuita y universales y la policía empieza a cambiar su color azul por un preocupante gris.
¿Estas reflexiones no se os pasan por la cabeza? Si la respuesta es sí ¿Algo tendremos que hacer? ¿Sabéis lo más lamentable de todo esto? No veo oposición y cada vez más creo que la política de los políticos del gobierno y la política de los políticos de la oposición, nada tiene que ver con la política de los ciudadanos.
Post data: A día de hoy y confirmado que el PP ha tenido de manera continuada una doble contabilidad. Aquí no ha dimitido nadie
El artículo no deja títere con cabeza. Dice la verdad como la vida misma. El problema es la desconfianza hacia la clase política. Creo que un poco de medicina interna, un poco de mea culpa por parte de la clase política no vendría nada mal. Es intolerable que un expresidente de la Comunidad Balear, Jaume Matas, ex Ministro con Aznar, haya sido condenado y pida la no ejecución de la condena a cárcel que tiene porque a su vez ha pedido su último cartucho que es el indulto al gobierno de la nación a la postre compañeros de partido. Lo mismo ha ocurrido con el ex alcalde de Torrevieja del mismo partido que ha pedido otro. El último que queda por pedirlo es Carlos Fabra, ex presidente de la Diputación de Castellón, igualmente condenado tras diez años de dilataciones judiciales. Con este panorama es normal que los ciudadanos desconfíen de ellos. Solo una pregunta... Con la que está cayendo, como es posible que el partido socialista no termine de despegar en las encuestas? Quizás porque dichos ciudadanos todavía tiene en la retina el hecho que la crisis comenzó con estos? En estos momentos quizás llegue el momento del acto de contrición y mirar hacia abajo y estar a la misma altura que la calle, porque en definitivas cuentas, el político se debe a ellos, dado que cada cierto tiempo son los que lo colocan o quitan del sillón. Un saludo.
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