miércoles, 27 de julio de 2011

El cuadro más bello




           Idea y enseñanza principal


Debemos tratar de hacer lo mejor posible 
todo aquello a lo que nos dedicamos,
sin importar los premios que esperemos.



Había en un país un rey amante de la pintura y la naturaleza que quiso poseer el más bello cuadro que pudiera hacerse de los paisajes de su reino. Para ello convocó a cuantos pintores habitaban aquellas tierras, y una mañana los guió hasta su paisaje favorito.
- No encontraréis una imagen igual en todo el reino - les dijo-. Quien mejor la refleje en un gran cuadro tendrá la mayor gloria para un pintor.
Los artistas, acostumbrados a dibujar los más bellos parajes, no encontraron el lugar tan magnífico como el mismo rey pensaba y, viendo que su fama y su gloria no aumentaría, se propusieron resolver el encargo rápidamente. Todos tuvieron sus cuadros listos a media mañana, excepto uno, que a pesar de pensar lo mismo que sus compañeros sobre el paisaje, quiso pintarlo lo mejor posible. Puso tanto esmero en su trabajo, que al caer la tarde, cuando llevaba ya algunas horas pintando en solitario, apenas había completado un pedacito del lienzo.
Pero entonces ocurrió algo maravilloso. Al ponerse el sol, las montañas crearon un increíble juego de luces con sus últimos rayos y, ayudadas por los reflejos del agua en un río cercano, un extraño viento que retorcía las nubes y los variados colores de miles de flores, dieron a aquel paisaje un toque de ensueño insuperable.
Así pudo entonces el pintor entender la predilección del rey por aquel lugar, y pintarlo con su esmero habitual, para crear el más bello cuadro del reino.
Y aquel laborioso pintor, que no era más hábil ni tenía más talento que otros, superó a todos en fama gracias al cuidado y esmero que ponía en todo cuanto hacía.
Autor.. Pedro Pablo Sacristán

domingo, 10 de julio de 2011

“LO QUE QUEDA”


El 18 de noviembre de 1994, Itzhak Perlman, el violinista, entró al escenario para dar un concierto  en el "Avery Fisher Hall", del Lincoln  Center de la ciudad de Nueva York. Si alguna vez ustedes estuvieron en un  concierto de Perlman, ustedes sabrán que llegar al escenario no es un  pequeño logro para él. El tuvo polio cuando fue niño, tiene ambas piernas  sujetas con bragueros y camina con la ayuda de dos muletas.  
Verlo cruzar por el escenario dando un paso por vez, costosa y lentamente es una visión 
asombrosa. El camina penosa pero majestuosamente hasta que llega a su silla. Entonces se sienta  lentamente,  pone sus muletas en el suelo, afloja los sujetadores de sus piernas, toma un   pie hacia  atrás  y extiende el otro hacia adelante, entonces se inclina y  levanta el violín,  lo pone bajo su mejilla, hace una señal al director y  comienza a  tocar. 
Hasta ahora la audiencia está acostumbrada a este ritual. Ellos permanecen  sentados mientras él hace su trayecto hasta su silla. 
Permanecen reverentemente silenciosos, mientras él afloja los sujetadores de  sus piernas, Aún esperan hasta que esta listo para tocar. Pero esta vez algo anduvo mal. Justo cuando terminaba sus primeras estrofas, una de las cuerdas de su violín se rompió. Pudimos escuchar el ruido, saltó como un tiro atravesando  el salón. No había equivocación sobre lo que ese sonido significaba. 
No había tampoco dudas sobre lo que él tendría que hacer. Los que estábamos allí esa noche, pensamos: "tendrá que levantarse, ponerse los bragueros  nuevamente, levantar las muletas y arrastrarse fuera del escenario ya  sea  para encontrar otro violín, o encontrar otra cuerda para el suyo". 
Pero él no lo hizo. En su lugar, esperó un momento, cerró sus ojos  y luego hizo la señal al director de comenzar nuevamente. La orquesta  comenzó, y él  tocó desde el punto en el que se había detenido. Y tocó  con  tanta pasión,  y tanto poder, y tanta pureza, como nosotros nunca lo  habíamos escuchado  antes. Por supuesto todo el mundo sabía que es imposible interpretar un  trabajo sinfónico con solo tres cuerdas. Yo sé eso, y seguramente muchos de ustedes  sabrán eso. Pero esa noche Itzhak Perlman rehusó saberlo. 
Ustedes hubiesen podido verlo modulando, cambiando, recomponiendo la pieza en su cabeza. En un punto, eso sonó como si él estuviera sacando el  tono de  las cuerdas que se había roto y consiguiendo nuevos sonidos que ellas nunca habían hecho jamás antes. 
Cuando terminó, hubo un impresionante silencio en el sala, y  entonces  la gente se levantó y lo aclamó. Hubo un extraordinario aplauso  proveniente  de cada rincón del auditorio. Estábamos todos de pie gritando y animando,  haciendo todo lo que podíamos, para demostrar cuánto apreciábamos lo que él  acababa de hacer. 
El sonrió, se secó el sudor de sus cejas, detuvo su inclinación para aquietarnos y luego dijo, no con presunción,  sino en un tono reverente, pensativo, calmo, "Ustedes saben,... algunas  veces... la tarea del artista es descubrir cuánta música uno puede hacer con lo que aún le queda". 
Que maravillosa línea ésta. Ha permanecido en mi mente siempre desde que la escuche. Y ¿quién sabe? Tal vez es la definición de la Vida, no sólo para los artistas, sino para todos nosotros. 
Aquí hay un hombre que se ha preparado toda su vida para hacer música con un violín de cuatro  cuerdas, quien, repentinamente, en medio de un concierto, se encuentra con  solo tres cuerdas, así que realizó música  con tres cuerdas. Y la música que hizo esa noche con solo tres cuerdas, fue  más hermosa, más sagrada, y más memorable, que ninguna que haya hecho jamás,  cuando él contaba con un violín de cuatro cuerdas. 

Así que, tal vez, nuestra tarea en este mundo que vivimos, confuso, inestable y que cambia velozmente sea hacer música, al principio con todo lo  que tenemos, y luego cuando eso no es más posible, hacer música con todo lo que nos quede. 

domingo, 3 de julio de 2011

Gacela de un amor imprevisto- Mayte Martín


Lo ha vuelto a hacer...la voz de Maite MartÍn consigue hacerte volar, soñar, sentir...cuando la voz sale de lo mas profundo del alma...consigue que transpase tu cuerpo y te toque el alma...y vaya con tanta belleza junta duele.



GACELA DEL AMOR IMPREVISTO
Nadie comprendía el perfume 
de la oscura magnolia de tu vientre. 
Nadie sabía que martirizabas 
un colibrí de amor entre los dientes.
Mil caballitos persas se dormían 
en la plaza con luna de tu frente, 
mientras que yo enlazaba cuatro noches 
tu cintura, enemiga de la nieve.
Entre yeso y jazmines, tu mirada 
era un pálido ramo de simientes. 
Yo busqué, para darte, por mi pecho 
las letras de marfil que dicen siempre.
Siempre, siempre: jardín de mi agonía, 
tu cuerpo fugitivo para siempre, 
la sangre de tus venas en mi boca, 
tu boca ya sin luz para mi muerte.


            Lorca en canciones
El  germen de una etapa de una de sus  obras poéticas, se encuentra en una etapa previa de la misma obra: la angustia (o la desesperación) amorosa que surge en Diván del Tamarit es la evolución de estos conflictos donde el amor se ha desarrollado en una dirección especial: lo que se ha dado en llamar "amor oscuro". 

Las doce gacelas que componen la primera parte configuran una órbita alrededor del tema del amor, y cada una de ellas proporciona un diferente ángulo de visión. Cada una de las gacelas, al reconstruir una situación amorosa, está estructurando una verdad que solo se yergue al integrar la lectura de las doce piezas.


GACELA DEL AMOR IMPREVISTO.

La no espera que el hablante tiene del amor ya se revela en este título. Lo inusitado que acontecerá será la cercanía con el otro ser. El hablante comprende y sabe lo profundo que el otro cuerpo tiene: el perfume erótico del sexo y del pubis. Estas formas de amor ocultas que el hablante cultiva descubren una capacidad amorosa del otro (martirizar) que pone delante ya la experiencia sufriente. Los dientes del otro ya señalan lo agudo del ataque. Sin embargo, el hablante es el escogido para la iniciación, como reitera la ubicación de "nadie...nadie", a la cabeza de los versos primero y tercero de esta estrofa.
Una mención a la tradición arábigo-andaluz en una imagen: " Mil caballitos persas...", donde el pelo rizado se emparenta a los lanudos caballos árabes, en una imagen que ya inicia la mitificación -por los atributos cósmicos, la luna (y su fatídico presagio en este caso) - del otro. De la frente, a la cintura, a la cual se ata el hablante. Así como "Mil caballitos" son un numero completo y perfecto, así también lo son las "cuatro noches". Esta cintura es amiga del ardor y del fuego, del contacto hasta el martirio. Esta estrofa detalla el momento de la unión pero ya es un pasado, un cuerpo que el hablante contempla. En la primera estrofa había cercanía espiritual, comprensión; en la segunda también lo físico se ha realizado ya.
 La tercera estrofa la nieve ya se ha vuelto artificial, convirtiéndose en algo paralítico: el yeso. Esa es sólo una cara, porque también hay jazmines en el otro: ahora aparece su mirada, en este gradual acercamiento que el poema entrega. Esa mirada es contacto que funda al otro de una manera determinada: esa mirada es fertilidad potente (los jazmines son transmisión de vida en "La sangre derramada", segundo poema de Llanto por Ignacio Sánchez Mejías. Pero en esta vitalidad están los signos adversos: la palidez y el yeso (la muerte se caracteriza como "corazón de yeso" en "Gacela del recuerdo de amor"). La actitud auténtica del hablante queda clara: entrega al otro la palabra siempre, salida de su corazón, pero en letras frías de marfil, que cambian de sentido al dirigirse al otro, y como la unión ya es ida, esta palabra siempre califica ahora la separación, que asume la conciencia (jardín, en oposición a selva, lo no-consciente), y eso es en primera instancia, como el hablante lo dice, "tu cuerpo fugitivo para siempre". La eternización que el hablante buscó tuvo opuesto resultado; ante el amor aparecerá ahora la muerte, con más poder, en una agonía que comienza en este mismo punto. Tras el otro que se va lo único que permanece es su sangre en la boca del hablante. El hablante capta como se escapa el cuerpo y eterniza ese instante con letras, con lenguaje. Está dispuesto a eternizar cualquier cosa, incluso la muerte. El hablante ansía una muerte
"la luz" (Gacela de la huida); aquí dice "tu boca ya sin luz para mi muerte". La boca ambivalente del otro (que crea y destruye) no puede proporcionar ningún tipo de protección, y el hablante queda arrojado sobre sí mismo. El hablante y el otro se agotan en el acto de amor, que los remite a la muerte.

LOS DERECHOS HUMANOS ,SON PARA LOS HUMANOS DERECHOS.



Hace poco, las madres de PANDILLEROS  encarcelados, realizaron una manifestación, exigiendo los  "DERECHOS" de sus hijos. 

Acá está la respuesta de una  madre ciudadana, hacia la madre que protestaba.
DE  MADRE A MADRE:

"Vi tu enérgica protesta delante de las  cámaras de TV, en la reciente manifestación en favor de la  reagrupación de presos y su transferencia a cárceles cercanas a  sus familiares, y con mejores prestaciones. Vi cómo te quejabas de la distancia que te separa de tu hijo, y de lo que  supone económicamente para ti, ir a visitarlo como consecuencia de  esa distancia. Vi también toda la cobertura mediática  que dedicaron a dicha manifestación, así como el soporte que  tuviste de otras madres en la misma situación y de otras personas  que querían ser solidarias contigo, y que contabas con el apoyo de algunas organizaciones y sindicatos populistas, comisiones  pastorales, órganos y entidades en defensa de los derechos  humanos, ONGs etc. etc. 
Yo también soy madre y puedo  comprender tu protesta e indignación. Enorme es la  distancia que me separa de mi hijo. Trabajando mucho y ganando  poco, idénticas son las dificultades y los gastos que tengo para  visitarlo. Con mucho sacrificio sólo puedo visitarlo los domingos,  porque trabajo incluso los sábados para el sustento y educación  del resto de la familia. Felizmente, también cuento con el  apoyo de amigos, familia, etc. Si aún no me reconoces, yo soy la madre de aquel joven que se dirigía al trabajo, con cuyo  salario me ayudaba a criar y mandar a la escuela a sus hermanos  menores, y que fue asaltado y herido mortalmente a balazos  disparados por tu hijo. En la próxima visita, cuando tú estés  abrazando y besando a tu hijo en la cárcel yo estaré visitando al  mío y depositándole unas flores en su tumba, en el cementerio.  ¡Ah! Se me olvidaba: ganando poco y sosteniendo la economía de  mi casa, a través de los impuestos que pago, tu hijo seguirá  durmiendo en un colchón y comiendo todos los días. O dicho de otro  modo: seguiré sosteniendo a tu hijo malhechor. Ni a mi casa, ni  en el cementerio, vino nunca ningún representante de esas  entidades (ONGs), que tan solidarias son contigo, para darme apoyo ni dedicarme unas palabras de aliento. ¡Ni siquiera para  decirme cuáles son MIS DERECHOS! ¡Si estás de acuerdo con  esta carta, hazla circular! Quizás entre todos, podamos  revertir estos valores que existen en nuestro país, donde los  delincuentes, ladrones, terroristas y corruptos tienen más  derechos que los ciudadanos honrados y trabajadores, que sólo  queremos vivir en paz. ¡LOS DERECHOS HUMANOS SON PARA LOS  HUMANOS DERECHOS!             

No te rindas, aun estas a tiempo de alcanzar y comenzar de nuevo! ! ! !
                                                                                 Mario Benedetti.

sábado, 2 de julio de 2011

Carta de la maestra de mi hija a sus alumnos y alumnas.



24 de Junio 2011

A LA ATENCIÓN DE LAS MADRES DE MIS ALUMNOS.

A modo de disposición me gustaría hacer unas reflexiones referidas a las vacaciones de verano.
A partir de ahora dispondremos de más de dos meses para disfrutar a tiempo completo de nuestros hijos. Esto, que en principio puede parecernos cuando menos algo laborioso, no debería ser más que motivo de alegría. Ya no tenemos la presión de los horarios y a los niños les encanta estar con vosotras.
Lo que más quieren es que esteis pendientes de ellos. Dentro de unos años crecerán y no será igual. No debemos olvidarnos de estas cosas en ningún momento.
Los niños han sido muy buenos durante el curso, han trabajado mucho, han aprendido y también han disfrutado. Han demostrado que son capaces de trabajar solos, de hacer las cosas por sí mismos y están llenos de maravillosas ideas y de ganas de ponerlas en práctica. Nosotros sólo debemos ofrecerles las oportunidades y los medios necesarios y confiar en ellos. Debemos prestarles atención cuando desarrollen o muestren habilidades beneficiosas y positivas y no considerar aquellos momentos en los que recurren a los mimos o las rabietas para llamar la atención.
a nadie le gusta que le obligues a nada pero a todos nos gusta que nos apoyen y nos ayuden con nuestros intereses. Lógicamente, nosotros como adultos, debemos sugerir y orientar pero sabemos que de cualquier actividad se aprende, especialmente a ser mejor persona.
Así que, ahora que hay tiempo y "buen tiempo", aprovechadlo y disfrutad con los niños y con el resto de la familia, especialmente con los abuelos, a los que desde aquí, les mando un abrazo muy fuerte y a vosotras y a los niños.
!MUCHOS BESITOS!
FELIZ VERANO

MARIFELI
"Educar a un niño no es hacerle aprender algo que no sabía, sino hacer de él alguien que no existía" John Ruskin (1819-1900) Crítico y escritor británico.